Editor: Mario Rabey

8 de diciembre de 2008

Aniceto, de Leonardo Favio

por Mario Rabey

Favio nos dejó -en pura síntesis-, sencilla y mágica como siempre, su última película, donde convierte al Romance del Aniceto y la Francisca, que había sido filmada hace cuarenta años, en un ballet filmado ¡y actuado! Vean esta escena erótica, una de las más bellas en la historia del cine 




Como en otras de sus grandes películas, cualquier espectador puede ubicar la historia en el tiempo. El Fiat 600 que ocupa la escena en la primera secuencia dice claramente: estamos en la década de 1960. Luego, casi ninguna otra referencia temporal, salvo la cumbia clásica de los Wawancó, que además dice -además de la década- que estamos en algún lugar de Suramérica. El canal de riego, con su compuerta, al lado del Fiat, nos da una localización más precisa: una zona desértica con riego, y como se habla español, eso es Chile, o -ya en Argentina-, Cuyo o el Noroeste andino. Finalmente, una sola palabra -culeao- dice que estamos en Cuyo o en Chile. Pero el habla es argentina, así que no hay duda: Cuyo. La región donde nacieron y se criaron tempranamente Favio y su hermano, el autor del cuento en que se basa el guión de Aniceto.

Seguramente, quienes haya visto El Romance, reconocerán aquí el lugar donde fue filmada aquella, hace cuarenta años: Luján de Cuyo, aunque ahora no como locación natural sino como escenografía.

La película es -técnicamente hablando- un ballet fílmico, con partituras basadas en gran parte en músicas populares, especilamente tango. Ballet fílmico, el género que cultiva insistentemente el español Carlos Saura, otro maestro. Pero Favio alumbra una magia nueva: sus intérpretes, además de bailar muy, pero muy bien extraordinarias coreografías, actúan como dioses. Hernán Piquín -el Aniceto-, Natalia Pelayo -inmortalizando a la Francisca- y Alejandra Baldoni -la Lucía- ponen en evidencia la diferencia entre el drama y la tragedia. Porque en el gran cine, nunca hay drama: hay tragedia. Y como debe ser en la tragedia, se puede saber en qué territorio histórico y cultural transcurre su historia, que es universal.

Una de las escenas más hermosas de la película (y de la histoia del cine) se puede ver aquí.

Más info técnica, fotos, trailers, etc., en el sitio de la película.

No hay comentarios: